lunes, 31 de octubre de 2022

Natalicio de Alfredo Machdo

Primero de Noviembre de 1848. Nació en Ciudad Bolívar el médico, escritor e investigador científico, Alfredo Machado y murió en Caracas el 11 de octubre de 1920 a la longeva edad de 82 años, justamente cuando en su ciudad natal se celebraban los Juegos Florales en el Teatro Bolívar con motivo del Día de la Raza. Por cierto que su hermano Hilario Machado era el animador del programa y debió ser sustituido por el doctor Jm : Agosto Méndez para poder viajar al sepelio de su hermano. Alfredo Machado estudió primaria y secundaria en el Colegio Federal de Guayana. Allí se graduó de bachiller en filosofía el 2 de septiembre de 1866 bajo la rectoría del doctor Wenseslao Monserrate y seguidamente optó por el bachillerato en medicina recibiéndose como tal el 7 de agosto de 1871 bajo la rectoría del doctor L. M. Luzardo. Para doctorarse viajó a Caracas e ingresó en la Facultad de Medicina de la Universidad Central de Venezuela donde se recibió de doctor en medicina en 1872. Empezó a ejercer la profesión en los Estados Cojedes y luego en Guárico donde se hizo tan popular que fue escogido para representar al Estado en el Parlamento Nacional. Aprovechó sus conexiones políticas para viajar a Europa a objeto de actualizarse y ponerse en contacto con los adelantos de la medicina. De vuelta a Venezuela fue reclamado por su ciudad natal, donde se dedicó al ejercicio de la medicina a la par que a la docencia. Dada su calidad de Primera categoría del Colegio Federal, se podía seguir la carrera de medicina. Aquí ejerció varias cátedras dentro de ese campo que le era propio (1990-1994). Retornó a la Capital de la República donde hizo carrera profesional y académica. Vicerrector de la Universidad Central de Venezuela, cofundador y primer Vicepresidente del Colegio de Médicos de Venezuela, Presidente de la Junta de Instrucción del Distrito Federal, Presidente de la Academia Nacional de Medicina, de la Comisión Organizadora del Primer Congreso Venezolano de Medicina. Igualmente del II Congreso, Corresponsal de la Sociedad de Medicina e Higiene Tropicales de Londres y Presidente del comité venezolano del Primer Congreso Americano del Niño. Autor de los trabajos de investigación “Descartes y el Método”, “La Fiebre amarilla”., “Fiebre tifo-malárica” Un busto le fue erigido en la Academia Nacional de Medicina en 1963. (AF

domingo, 30 de octubre de 2022

Natalicio de J. F. Reyes Baena

31 de octubre de 1909. Guayanés de una vasta trayectoria intelectual. Abogado, pedagogo, periodista y autor de una reconocida obra ensayística en la que abordó todos los temas de la realidad nacional. Director de la revista Oriflama y del diario El Nacional de Caracas, Director de la Facultad de Humanidades de la UCV y Premio Nacional de Periodismo. Nació para vivir 79 años, pues falleció el primero de julio de 1988 “sin arterioesclerosis en las ideas y mucho menos en la pluma” como bien lo señaló en su oportunidad el periodista Francisco Salazar Martínez. Estudió secundaria en el Colegio Federal de Guayana y perteneció a la generación de guayaneses que junto con Héctor Guillermo Villalobos, Ricardo Archila, José Miguel Gómez Rengel, Juan Alberto Gambús, Jorge Figarella, Pablo Ruggeri, Herman Meinhardt y Carlos Tinoco Rodil se distinguieron en el campo intelectual y democrático en la última década de la dictadura gomecista. Desde el Centro Estudiantil del Colegio le tocó dirigir la revista Oriflama, publicada mensualmente entre 1926 y 1928 y que no obstante su calidad puramente literaria, sirvió de respiradero a las ideas democráticas y antiimperialistas. Se alejó de Ciudad Bolívar al dejar el Colegio Federal para ingresar a la Universidad Central de Venezuela en donde cursó y alcanzó el doctorado en Ciencias Políticas. De aquí pasó a fundar en calidad de director el Liceo Fermín Toro de donde salió para asumir la dirección del Ministerio de Educación. Ese mismo año aceptó la jefatura de Provincia del diario El Nacional y dos años después se encarga de la dirección del mismo diario de Puerto Escondido al tiempo que cursa Humanidades y Educación hasta graduarse en la mención periodismo impreso formando parte de la primea promoción de esa Escuela.. En 1957 dejó la dirección del diario El Nacional para hacer equivalencias en algunas materias y graduarse de abogado. En 1958 tras el derrocamiento de la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez se incorpora como docente en la Universidad Central de Venezuela llegando a ser decano de la Facultad de Humanidades. Juan Francisco Reyes Baena fue un humanista militante y en esa dirección estuvieron encausados sus escritos y lecciones. Afirmaba que “toda ciencia debería ser humanística, pues tanto las ciencias sociales como las experimentales tienen que orientarse hacia la eliminación de la miseria y la ignorancia, la desigual distribución de las riquezas y la aceleración del proceso de liberación de los pueblos”. (AF)

sábado, 29 de octubre de 2022

Protesta contra el Padre Blanco

30 de octubre de 1827, José Félix Blanco, siendo Intendente y Gobernador del Departamento Orinoco con cabecera en Barinas en 1827, fue comisionado por el Libertador para que se trasladase a Guayana, provincia de su jurisdicción departamental, a objeto de solventar con los habitantes un problema relacionado con los impuestos, pero después de tres meses de estada fue protestado y expulsado al igual que el Gobernador de Guayana José Manuel Olivares. Iniciaron el movimiento de rebelión el coronel Ramón Contasti, recién llegado de la campaña del Sur; Eusebio Afanador, coronel Francisco Pildaín, los alcaldes de la ciudad Felipe Domínguez y Nicanor Afanador y los concejales Bibiano Vidal, Manuel Bermúdez, Lorenzo Lezama y Felipe Cardier, apoyados por la guarnición de la plaza y buena parte de los citadinos. Entre las razones esgrimidas contra el Padre Blanco citaron los líderes del movimiento “la causa criminal pendiente seguida contra él por los munícipes del Cantón de Upata en 1822; por su conducta despótica, arbitraria e indecencia pública” y en realidad por resistir a los crecidos impuestos que él venía a cobrar en nombre del Gobierno de Bogotá. Los angostureños llenaron el vacío de las autoridades legítimas, designando Gobernador interino al Alcalde Felipe Domínguez y Comandante de Armas al Coronel Remigio Femayor, oficial que fue de la Caballería de Piar. El Padre Blanco fue embarcado en un Steel boat de James Hamilton anclado en el puerto y dejado en Cabruta a donde llegó escoltado por el coronel Ascensión Farreras.. El 17 de diciembre de ese año llegó a la Angostura el General José Laurencio Silva por orden del Libertador a reestablecer el ordeno constitucional interrumpido por la revuelta popular y a hacerle juicio a los comprometidos en el complot. Poco después el Libertador se vio obligado a destituir del departamento al Padre Blanco atendiendo a una protesta del Cabildo de Barinas. (AF)

Decapitado Sir Walter Raleigh

29 de octubre de 1618. Sír Walter Raleigh parecía tener muchos títulos: caballero, gentil hombre, poeta, filósofo, militar, parlamentario, gobernante, político, en fin, favorito de la Reina Virgen, pero para los hispanos no era más que un Pirata que merecía morir decapitado y, en efecto, murió bajo el filo del hacha del verdugo de la Justicia Real. Pero, tal vez, no haya sido por Pirata, sino porque gastó toda una fortuna, propia y ajena, incluso, sacrificó vidas, hasta la de su propio hijo, sin lograr para su Reino las ricas y doradas tierras prometidas de Guayana. Han pasado siglos y la imagen de Raleigh, sigue viva en el espacio que no pudo conquistar y en la Torre normanda de Londres donde fue ajusticiado por Jacobo Primero, sucesor de la Reina Isabel, quien fue siempre su virgen protectora. La desgracia de Raleigh, quizás, comienza con la muerte de la Reina Virgen en 1603. Desde entonces fue su calvario, pero también su resistencia, su lucha por sobrevivir y continuar con la empresa que había emprendido. Escribe dos libros trascendentales. “El descubrimiento del grande, rico y bello imperio de Guayana” e “Historia del mundo “ en cuatro tomos. El gran aventurero de los mares y navegante intrépido, tejió sueños dorados, sembró esperanzas y dio a conocer estos horizontes del continente nuevo en alas de la fantasía, alas que al final se quebraron al tratar infructuosamente de conquistar y colonizar las tierras norteñas de Virginia y el Valle del Orinoco. En una de sus incursiones murió su hijo Wat, enfrentado al Gobernador de Guayana, Diego Palomeque de Acuña. Luego su lugarteniente, Lorenzo Keymís, iría al suicidio mientras Raleigh, deprimido, frustrado, retornaba a su tierra donde bajo la niebla imperecedera lo aguardaba la admonición mortal de Jacobo Primero. Antes de ser decapitado en aras de la paz de Inglaterra con España, a quien el antiguo Capitán de la Casa Real odiaba en sus predios americanos, escribió este su epitafio el 29 de octubre de 1618. “Tal es el tiempo depositario / de nuestra juventud, dicha y demás / y no devuelve sino tierra y polvo. /El que en la tumba muda y triste /cuando terminó nuestro camino,/ la historia encierra de la vida nuestra /.De esta tumba, polvo y tierra, / me librará nuestro señor, según confío.” (AF)

jueves, 27 de octubre de 2022

El bronce pedestre de Bolívar

28 de octubre de 1869. La Primera estatua de bronce del Libertador Simón Bolívar se erigió en la Plaza Mayor de Angostura el 28 de Octubre de 1869, fecha en que ya la histórica Capital había cambiado su nombre por el de Ciudad Bolívar. La colocación de esta estatua hecha en Italia por el escultor Pedro Tonerani en el mismo molde en que hizo la de Bogotá y la cual domina el llamado Cuadrilátero Histórico de Ciudad Bolívar, se hizo por resolución del entonces gobernador Juan Bautista Dalla Costa Soublette, pero la iniciativa la tomó la Asamblea Constituyente del Estado Soberano de Guayana en 1864. A este gobernante de ascendencia italiana se le atribuye, además, el decreto de instrucción popular gratuita y obligatoria, antes de que el Presidente de la República, Antonio Guzmán Blanco, la implantase nacionalmente. Asimismo se le atribuye haber salvado a Guayana de los horrores de la Guerra Federal, aunque después no pudo librarla de la Revolución de los Azules. Una junta designada por el gobierno regional de Juan Bautista Dalla Costa e integrada por el General Simón Briceño, doctor Juan Teófilo Benjamin Siegert, José Lezama, Hilarión Gambús, Tomás Machado y Andrés Montes, llevó a feliz término la obra monumental, financiada a través de una colecta pública en la que el primer enrolado fue el propio Dalla Costa con una contribución personal de 250 pesos. Según las Crónicas que datan de la época, en el departamento Heres que así se llamaba entonces el Municipio Ciudad Bolívar, se recogieron 11.495,43 pesos; en el departamento Yuruari, 545,03 pesos; en el departamento Upata, 434,25 pesos y en el departamento Alto Orinoco, 71,50 pesos para un gran total de 12.246,21 pesos. El 28 de octubre de 1869 quedó solemnemente inaugurada la estatua y el gramático guayanés, Licenciado Ramón Isidro Montes, pronunció el discurso de orden. Era día de San Simón, onomástico propicio para honrar al famoso caudillo que desde Angostura hasta el Perú hizo posible la guerra emancipadora de Venezuela y América. (af

miércoles, 26 de octubre de 2022

La Planta de Briquetas

27 de octubre de 1973. El Presidente de la República, Rafael caldera, inauguró en Ciudad Guayana la planta de briquetas y trituración, secado y clasificación de mineral de hierro de la Orinoco Mining y puso en marcha las ampliaciones de las celdas de reducción de Alcasa y el inicio de las operaciones de la empresa Metalmeg diseñada para fabricar implementos petroleros y petroquímicos. La Planta de briquetas, única en su tipo en el mundo, fue concebida para reducir mineral de hierro metálico, cuya utilización en Sidor contribuye a aumentar la productividad de la Siderúrgica Nacional y a reducir el consumo de coque. La capacidad de producción de la planta es de un millón de toneladas métricas de briquetas por año con tenor o contenido de hierro de 86,5 por ciento, en contraste con el tenor promedio de 58 por ciento del mineral fino en su estado natural. Esto no sólo destacaba su importancia por representar el primer paso concreto para beneficiar localmente el mineral de hierro y darle valor agregado, sino porque su utilización vino a aumentar la productividad de Sidor y disminuir el consumo de coque. La Planta de Briquetas comenzó a consumir 1.400.000 metros cúbicos de gas natural por día comprado a la CVP y 114.000 KWH comprados a la CVG Electrificación del Caroní. En cuanto a la Planta de Trituración, Secado y Clasificación, fueron invertidos 112.000 millones y la misma permitía reducir el tamaño máximo del mineral de acuerdo con las exigencias de la industria siderúrgica, asimismo homogenizarlo para lograr una composición química y física invariable y clasificarlo. .(AF)

Logia Asilo de la Paz

26 de octubre de 1854. La Logia Asilo de la Paz de Ciudad Bolívar perdura desde octubre de 1854 por iniciativa de José Gabriel Ochoa quien fue su primer Venerable Maestro y luego que “La Concordia”, fundada en 1818, se había extinguido por los avatares. De ella sólo quedó el homenaje a su memoria una calle larga que cruza todo el Casco Histórico de Ciudad Bolívar. José Gabriel Ochoa, su primer Venerable, hijo de Antonio José Ochoa y María Manuela Urbina, había nacido precisamente en 1818 cuando fue fundada en Angostura, su ciudad natal, la Logia La Concordia. Durante su juventud estuvo al lado del Gral. Tomás de Heres, pero se destacó como un gran liberal bajo las bandaras amarillas de Ezequiel Zamora con quien desembarcó en las costas de Coro el 22 de febrero de 1852 llegando a ser Secretario del General Juan Crisóstomo Falcón durante la Guerra Federal. Fue diputado provincial, congresista, Gobernador de Guayana en 1872, Ministro de Interior y Justicia, de Relaciones Exteriores y de Crédito Público. Falleció el 17 de febrero de 1876. Acompañaron a José Gabriel Ochoa en la fundación da la Logia Asilo de la Paz Nº 13, Simón Meza y Fermín Carreño como Primer y segundo vigilantes, respectivamente; Ramón Serrano en calidad de Orador Fiscal y Francisco Serrano, como Secretario. La Logia Asilo de la Paz No. 13 que tiene antecedente histórico en la Logia La Concordia fundada por los patriotas en los sótanos de la Casa del Congreso de Angostura en 1818, no tuvo edificación propia sino a partir de febrero de 1875 en la calle Santa Ana donde aún pervive. Anteriormente su sede era itinerante en casas arrendadas. Su sede y templo actuales fueron erigidos sobre los muros de una casa de familia propiedad del comerciante Ángel Santos Palazzi. Adquirida y cancelado su valor de 4 mil pesos en varias mensualidades. La Casa con el tiempo fue transformada, se le construyó en la fachada dos columnas simbólicas del templo de Salomón y el salón o templo de los ritos propios de la francmasonería en forma de escuadra. En esa vetusta casa en cuyo jardín mora una estatua pedestre del Libertador inaugurado en 1883, se observan signo de la vieja tradición que parecen inmortales y que se confunden con todos los orígenes atribuidos a la masonería: las columnas, las espadas de Las Cruzadas, los signos del paganismo, la espada, la escuadra, el compás y el mandil del albañil. Por allí han pasado militares, guerreros, acaudalados hombres de negocios, benefactores, filántropos, en fin, líderes de la libertad y la fraternidad. Además de la Asilo de la Paz, existen en Guayana la Logia “Pedro Cova”, de Upata; “Dios y Patria”, de Tumeremo; “Dalla Costa”, de El Callao; “Sol de Imataca”, de El Palmar; “Estrella Guzmán Blanco”, de Ciudad Piar; “Domingo Faustino Sarmiento”, de San Félix; “Diego de Ordaz”, de Puerto Ordaz; “César Obdulio Iriarte”, de Puerto Ordaz; “Estrella del Roraima” de Santa Elena de Uairén y Logia Presidente Raúl Leoni, de Guri. Existen además en el Estado tres Logias en situación de irregularidad, vale decir, sin reconocimiento de las potencias Mundiales Regulares.

lunes, 24 de octubre de 2022

Sucre Gobernador del Bajo Orinoco

25 de octubre de 1817. Bolívar nombró a Vicente Sucre y Urbaneja, Gobernador de las fortalezas de Guayana la Vieja y Comandante Militar del departamento del bajo Orinoco, sustituyendo a su hijo, el entonces coronel Antonio José de Sucre que ejercía ese cargo desde el 17 de septiembre del mismo año y que tenía también el encargo de organizar como en efecto ocurrió, un batallón con el nombre de Orinoco que pudo al mando de su hermano Gerónimo. Vicente Sucre, quien ejerció la Gobernación del Bajo Orinoco hasta 1818, había sido Regidor y Alcalde ordinario del Ayuntamiento de Cumaná en 1799 y 1800. Casado con María Manuela Alcalá y Sánchez, enviudó en 1802 y se volvió a casar con Narcisa Márquez de Valenzuela y Alcalá. Alcanzó el grado de coronel del cuerpo de cadetes de Cumaná y cono tal, reconoció el movimiento independentista. Su muerte se registró en junio de 1824 cuando su hijo Antonio José de Sucre se hallaba en Huanuco preparando su ejército para abrirse paso hasta la conquista total y definitiva del Perú. Todavía en agosto de ese año nada sabía de la muerte de su padre, pues le escribe a su amigo el coronel Vicente Aguirre el 3 de agosto desde Pasco diciéndole que “anoche he recibido su muy apreciable carta del 22 de junio con las tres cartas de mi familia que se sirve acompañarme. Doy a Vd. Mil gracias: hacía meses que no tenía cartas de mi casa y éstas, aunque atrasadas, me han dado mucho gusto. Van esas cartas para mi padre, la una irá en el primer correo y la otra en el correo siguiente”.(AF)

EXPEDICIÓN DE LÍMITES

24 de octubre de 1753. El rey Fernando VII, expidió en San Lorenzo una cédula real, dirigida al Gobernador y Capitán General de la provincia de Venezuela y ciudad de Santiago León de Caracas, por medio de la cual le remite copia certificada del Tratado firmado con la Corte de Lisboa sobre los dominios de la parte meridional de la América y nombramiento de Comisarios por las dos partes para reconocer y establecer la frontera. La Cédula, firmada, en lugar del Rey, por Zenón de Zomo y Villa, da cuenta de los nombres de los Comisarios que por la parte de España deberán ejecutar lo acordado por el río Marañón y parte del Norte de la línea. Ellos son el Jefe de Escuadra don Joseph de Iturriaga, el coronel don Eugenio de Alvarado, el capitán de navío don Antonio de Urrutia y el de fragata don José Solano. “los cuales se han de encaminar a su destino por Cumaná y el río Orinoco..” Pero los Comisarios de Portugal hicieron mutis en el escenario de la frontera de la línea Norte. Nunca se presentaron, por lo que la parte hispana se dedicó a organizar y estructurar la provincia de Guayana fundando nuevos pueblos, fortificándola y recomendando la mudanza de la capital Santo Tomás de la Guayana a la angostura del Orinoco, dividida en dos Comandancias. La Expedición de Límites no perdió su tiempo e hicieron y lograron con innumerables sacrificios y pérdidas de vida más de lo debido a pesar del Tratado de El Pardo (1761) que anulaba el Tratado de Madrid (1750). Las causas de ésta fueron las dificultades enfrentadas a lo largo de la década de 1750 para lograr una demarcación de las posesiones sudamericanas portuguesas y españolas, en un área enorme e inhóspita; la denominada Guerra Guaranítica, que consistió en la resistencia de los indígenas y jesuitas de los siete pueblos de las Misiones Orientales del Uruguay a salir de aquel lugar para que fuese entregado a Portugal; y la muerte, producida dos años antes, del rey español Fernando VI, con la subida al trono de Carlos III, el cual decidió la revisión general de los acuerdos hechos con los portugueses (AF)

domingo, 23 de octubre de 2022

BOLÍVAR PERSIGUE A LOS CORRUPTOS

23 de octubre de 1817. El gobierno supremo de la república prohibió la extracción clandestina de mulas, caballos y ganados, porque el estado los necesitaba para hacerse con ellos de elementos de guerra, para el servicio de los cuerpos de caballería y para la subsistencia del ejército. El oficio del Jefe Supremo para el Gobernador de las fortalezas de la Antigua Guayana dice lo siguiente: Señor Gobernador de las Fortalezas de la Antigua Guayana. Angostura, Octubre 23 de 1817. Señor Gobernador: Estoy informado que por Piacoa y otros lugares inmediatos a las bocas, se extraen clandestinamente mulas, caballos, ganados &c. habiéndose reservado el Gobierno estos artículos, por ahora, para comprar armas y municiones, los que se emplean en este giro cometen el doble crimen de defraudadores de los derechos nacionales y de aniquiladores de los objetos únicos que tenemos para hacernos de los preciosos elementos de guerra. Ordeno, pues, á V. S. que por sí y sus agentes comisionados, indague y examine escrupulosamente qué personas se hayan empleado ó empleen en este giro después de la ocupación de estas plazas por nuestras armas; y no perdonando medios para aprehenderlas me las remitirá todos bienes asegurados á esta plaza con el proceso que les forme. Dios guarde á V. S. muchos años. Simón Bolívar. Otro oficio sobre el mismo asunto es remitido al General Rafael Urdaneta en los siguientes términos. Señor General: Se me ha informado por personas muy fidedignas que por San Miguel ó las Tablas se han embarcado mulas, cueros y otros artículos, clandestinamente: que en los potreros situados a las orillas del río de Orinoco existen partidas de animales para este objeto. Indague V. S. escrupulosamente sobre todo esto: aprehenda y sumarie a cuantos hayan hecho o hagan este giro tan perjudicial a los intereses del Estado; y siendo cierto, remítamelos con seguridad a este Cuartel general junto con sus procesos. Dios guarde a V. S. muchos años. Simón Bolívar. (AF)

sábado, 22 de octubre de 2022

Bolívar pide libertad de Bonpland

22 de octubre de 1823. Bolívar envía una carta al gobernante del Paraguay, Gaspar Rodríguez Francia, intercediendo por la suerte de su amigo Amadeo Bonpland, quien se halla detenido por el dictador a causa de haber introducido innovaciones en el cultivo de la yerba mate, el cual consideraba perjudicial para el comercio de s país. Apresado en diciembre de 1821 y conducido a Itapúa, Bolívar, a solicitud de su esposa, trata de interceder por su libertad, pero no lo consigue y Bonpland quedó en cautiverio durante diez años. Bonpland, junto con Alejandro de Humboldt, había estado durante el mes de julio de 1800 en Angostura tras una expedición científica por todo el curso del Orinoco y Río Negro y ambos científicos habían conocido a Bolívar en Paris y acostumbraban cartease. Enterado el Libertador de l suerte de Bonpland escribe a su esposa: “Hace muchos años tuve la satisfacción de ligar mis sentimientos a los del célebre y virtuoso Bonpland, ahora digno esposo de Vd. He sabido con sumo dolor, que este caballero se halla prisionero en el Paraguay con la inocencia que caracteriza a los mártires. En consecuencia, me tomo la libertad de dirigir a usted tres cartas para el señor Francia, con el laudable fin de rogarle por la libertad de mi estimado amigo Bonpland; las que suplico a usted se sirva dirigirlas por diferentes vías al Paraguay…” La carta de Bolívar a Rodríguez Francia decía entre otras expresiones: “Yo me encuentro ahora con el sentimiento de saber que mi adorado amigo, el señor Bonpland, está retenido en el Paraguay por causas que ignoro. Sospecho que algunos falsos rumores hayan podido calumniar a este virtuoso sabio y que el gobierno que V. E. preside se haya dejado sorprender con respecto a este caballero. Dos circunstancias me impelen a rogar a V. E encarecidamente la libertad del señor Bonpland. La primera es que yo soy la causa de su venida a América, porque yo fui quien le invité a trasladarse a Colombia y ya decidido a ejecutar su viaje, las circunstancias de la guerra lo dirigieron imperiosamente hacia Buenos Aires; la segunda es que este sabio puede ilustrar mi patria con sus luces, luego que V. E tenga la bondad de dejarle venir a Colombia, cuyo gobierno presido por la voluntad del pueblo”. (AF)

viernes, 21 de octubre de 2022

Temblor de espanto

21 de octubre de 1766. Un terremoto sacudió a Venezuela en casi toda su extensión y no obstante estar Guayana situada sobre una inmensa roca inconmovible, no dejó de estremecerse y hacer que sus pobladores perdieran la noción del tiempo hasta el punto que el misionero jesuita italiano Felipe Salvador Gilij, quien se hallaba en La Urbana, sostuviera al igual que los habitantes de esa aldea que el movimiento sísmico había tenido duración de una hora. Felipe Salvador Gilij, quien rescató de los propios indígenas Tamanaco la leyenda de Amalivaca, dios creador del Orinoco, escribió “Me pareció a mi y a quien como yo estaba sin reloj, que el horrible movimiento duró una hora al manos. Otros dijeron que menos, pero lo cierto es que todos creyeron en común que una hora. En acontecimientos tan horribles, que tanto mueven la fantasía, ¿quién es capaz de decir la verdad? Continuaron después el mismo día y en los siguientes, y hasta que después de nueve meses me marché del Orinoco, diversos terremotos, unos grandes y otros pequeños, pero ninguno tan espantoso como el primero. Este espantoso terremoto habría derribado del todo pueblos construidos con muros. En el Orinoco no cayeron las cabañas, pero eran poco reparo para la ira divina, y cada uno, en vez de piedras, temía que se le abriera bajo los pies la tierra. Se abrió, en efecto, en algunas partes, manando hacia arriba donde antes no había, agua en abundancia. Rodaron de los montes abajo en gran abundancia los peñascos. Abrieron a guisa de volcanes, quedando después de ellos señales espantosas, los montes más altos. De una islita que estaba primero bajo la roca Aravacoto en el Orinoco, no quedó sino para funesta memoria un árbol. Dejó en seco su canoa el cacique de los Otomanos. Vuelto en sí, una vez acabado el terremoto, encontró que aquel lugar en que la había puesto se había llenado de agua no suya y había bajado lo menos dos varas”.(AF)

jueves, 20 de octubre de 2022

Expedición de Diego de Ordaz

20 de octubre de 1530. Diego de Ordaz, en calidad de Comendador, Adelantado y Alguacil Mayor, zarpó de San Lucas de Barrameda rumbo al Nuevo Continente a la conquista y poblamiento de nuevas tierras conforme a la Capitulación expedida en Madrid, vale decir las que van desde el Marañón hasta Macarapana, al Oeste del Golfo de Cariaco, “por todos los días de vuestra vida con salario de setecientos veinticinco mil mares (maravedíes) en cada un año contados desde el día que vos hizieredes a la vela en estos nuestros reinos, para hacer la dicha población e conquista, los cuales vos an de ser pagados de las rentas e derechos a nos pertenecientes en la dicha tierra que assy abeys de poblar”. Su primera escala para reforzar con más recursos la expedición, fue en las Islas Canarias de donde desplegaron velas el 13 de diciembre de 1530, día de Santa Cecilia, cuatro naves con 600 hombres y 36 caballos a su mando. Zarparon con buen tiempo de Tenerife rumbo a tierras vagamente conocidas y, por lo tanto, inexploradas, que parecían jurisdiccionales del Río Marañón, pero fuera de las posesiones del Reino de Portugal. Luego de prolongados períodos de calma y tempestades que lo desviaron de la ruta y disgregaron las naves, avistaron tierra dos grados por encima del paralelo equinoccial, a los veintiséis días de navegación. Pero no hallaban lugar adecuado para fondear los barcos y centrar su comando de operaciones hasta que lo vieron en Paria ya a mediados del mes de marzo de 1531. Pero Paria, al igual que Cubagua, era jurisdicción discutible, pues allí Antonio Sedeño, Gobernador de Trinidad, tenía un Fuerte al mando de Juan González de Sosa; de todas maneras, Ordaz impuso su fuerza y utilizó al propio Juan González, al mando de un grupo de sus hombres, para hacer una exploración previa del estuario. González, no obstante, se aventuró hasta la propia desembocadura del Caravaca, como los indígenas se referían al Río Caroní. Allí él y su compañía escucharon por primera vez el nombre de Uayana. Uayana se llamaba aquellas tierras selvosas avasalladas por inmersos caudales de agua.

Muere Isabel Soublette Jerez Aristeguieta

19 de octubre de 1833. Isabel Soublette Jerez Aristeguieta murió estando casada con el comerciante veronés radicado en Angostura, Juan Bautista Dalla Costa. Era ella hija de Antonio Soublette Piar y de Teresa Jerez Aristeguieta Blanco y Herrera, padres también del General Carlos Soublette, quien Jefe del Estado Mayor del Ejército Libertador y Presidencia de la República entre 1843-1847. Isabel era descendiente de las famosas Jerez Aristeguieta, hermanas conocidas como las “nueve musas caraqueñas” Mercedes, Josefa, Rosa, Teresa Begonia, Manela, Panchita, Belén y María Antonia) que colmaron con sus flirteos a la pacata ciudad de fines de la colonia española. De esta distinguida dama del mantuanaje caraqueño dijo en un libro el oficial inglés George Hippisley que era esbelta, blanca, de ojos azules, rostro delicado y manos finas y que fue una de las damas que coronaron a Bolívar cuando tras la Campaña Admirable hizo su entrada a Caracas en 1813 Desde entonces dice tuvo un trato íntimo y amoroso con el Libertador que se acentuó en Cartagena de Indias tras la emigración de 1814. Bolívar la reencontrará de nuevo en Puerto Príncipe y finalmente en Angostura donde contrajo matrimonio con el burgués italiano Juan Bautista Dalla Costa el 22 de marzo de 1818. El Libertador como regalo de boda le donó una casa donde vivieron y nacieron sus hijos Antonio, casado con Carmen Ayala; Teresa, casado con Leandro Miranda, hijo del Generalísimo; Isabel con Eugenio Trillón, quien levantó el pedestal donde en la plaza mayor de Angostura alza la estatua de Bolívar; y Juan Bautista, que ejerció varias veces el Gobierno de Guayana; Amelia, casada con José Antonio Mosquera;: César con Matilde Juliá García y Carlos que murió a la edad de dieciocho años. Después de la muerte de Isabel, Juan Bautista Dalla Costa volvió a contraer matrimonio, esta vez con doña Isabel Fortique, 7 de agosto de 1835, y con quien tuvo siete hijos, dos de ellos, Alfredo, casado con Emilia Boulton y Teresa casada con Alfredo Boulton.

lunes, 17 de octubre de 2022

Revolución de Octubre del 45

18 de octubre de 1945. Derrocado el gobierno del general Isaías Medina Angarita por un movimiento cívico militar cruento que instauró en el país un sistema democrático con raíces populares, pero que tan sólo habría de durar tres años, pues intervino después un golpe militar incruento que estableció un régimen totalitario desconocedor de la Constitución y atropellador de los más elementales derechos ciudadanos. El golpe militar contra el gobierno de Medina Angarita tuvo reacción en Ciudad Bolívar dos días después cuando reaccionaron contra el gobierno local los dirigentes principales de Acción Democrática y el Batallón Mariño Nº 9 acantonado en el Cuartel del Capitolio. El diario El Luchador tituló el lunes 22: “La Revolución ha triunfado en todo el país. Victoriosa jornada de la juventud militar y del partido Acción democrática. Constituida en esta Capital la Junta Revolucionaria Cívico-militar del Estado Bolívar”. Luego un editorial titulado: Radical cambio político. La junta la integraba Julio C. Paván, en calidad de Presidente provisional; José Luis Mattei, Ramón Vicente Tovar, Enrique Vecchionacce, José Luis Orsetti, Régulo Salazar, Luis Felipe Pérez Flores, Ramón Vicente Tovar, Rafael Simonovis, por el sector civil; y por el militar los subtenientes Ásale Roa Medina y Carlos R. Camacho Paz. Por mandato de la nacional, esta Junta local quedó disuelta dos días después (día 24 de octubre) que fue nombrado Héctor Guillermo Villalobos. Presidente del Estado. Villalobos, bolivarense nacido el 20 de julio de 1911 era director del Liceo Fermín Toro de Caracas y había sido diputado al Congreso por el Estado Bolívar en el periodo 1937-1940. Medina había ascendido al poder en abril de 1941, en tiempo de crisis general provocada por la segunda guerra mundial. Durante mandato se desarrolló un hermoso plan de obras nacionales, destinadas principalmente a la educación y se construyó la urbanización “El Silencio”, principio de la Caracas moderna. En el curso de la gestión medinista se observó un mayor acercamiento entre las naciones americanas, se abrieron las puertas de las cárceles, no hubo, por lo tanto, presos políticos ni exiliados y se disfrutaba, comparativamente con regímenes anteriores, un clima mayor de libertad y garantías ciudadanas.(AF)

El Guayanés

17 de octubre de 1988. En plena campaña electoral, el Grupo Comunicacional Guayana, dio a luz en la avenida principal de Castillito, Puerto Ordaz, la primera edición de “El Guayanés”, con la autodenominación “Diario del Sur”, formato Standard, seis columnas, bajo la dirección del periodista Celestino Adames Pérez, quien venía de dirigir el extinto diario El Pueblo de San Félix. Aparece como Editor y Presidente del “Grupo Comunicacional”, el Licenciado Omar González Moreno, entonces Gobernador del Estado Bolívar y ex Presidente de la Asamblea Legislativa. En la Secretaría de redacción Aliette Díaz y en la Coordinación, Judith González Rojas. Impreso en los talleres de la Editorial Santa Inés, abre la primera edición con el editorial “Buenos días Guayana” que traza lo que será el rumbo del nuevo periódico al servicio de la sociedad y progreso de Guayana; el anuncio de que está “en peligro la paz social por la grave crisis económica”, la plataforma oceánica adquirida por Ferrominera Orinoco y el programa de gobierno que propone Carlos Andrés Pérez desde Maracaibo para optar por segunda vez a la Presidencia de la República. El editorial del primer día no dejará de salir en las ediciones sucesivas, pero a una columna en la parte derecha inferior de la primera plana e identificado como “Punto de Vista”. Pero no duró mucho tiempo en manos de sus fundadores, La Editorial Santa Inés, con su fruto principal, pasó a otras manos y Omar González Moreno recogió sus bártulos y se reubicó en Puerto La Cruz donde fundó el tabloide “Diario del Sur”, denominación complementaria de “El Guayanés”, ahora en manos del ingeniero José Gregorio Castillejos, su director-editor, quien, acompañado en la subdirección por la licenciada Carmen Carrillo y en la jefatura de redacción por el licenciado Jorge Morillo, le imprimió otra imagen empezando por el logotipo que dejó de ser todo en letras mayúsculas para situarse en la parte superior del formato, tres cuerpos a todo color y con el lema: “Razón de la verdad”, sin quelonio.

Bolívar explica muerte de Piar

17 de octubre de 1817. Simón Bolívar, jefe supremo de la República de Venezuela, dirige una proclama a los soldados del ejercito Libertador explicando el proceso y ejecución de la sentencia de muerte contra el General, Manuel Piar. ¡Soldados! Ayer ha sido un día de dolor para mi corazón. El General Piar fue ejecutado por sus crímenes de lesa patria, conspiración y deserción. Un tribunal justo y legal ha pronunciado la sentencia contra aquel desgraciado ciudadano, que embriagado con los favores de la fortuna, y por saciar su ambición pretendió sepultar la patria entre sus ruinas. El general Piar a la verdad, había hecho servicios importantes a la República y aunque el curso de su conducta había sido siempre el de un faccioso, sus servicios fueron pródigamente recompensados por el Gobierno de Venezuela. “Nada quedaba que desear a un jefe que había obtenido los grados más eminentes de la milicia. La segunda autoridad de la República que se hallaba vacante de hecho, no la disidencia del general Mariño iba hacerle conferida antes de su rebelión; pero este general, que solo aspiraba al mando supremo, formó el designio más atroz que puede concebir una alma perversa. No solo la guerra civil, sino la anarquía y el sacrificio más inhumano de sus propios compañeros y hermanos se había propuesto Piar” ¡Soldados! Vosotros lo sabéis. La igualdad, la libertad y la independencia son nuestra divisa. ¿La humanidad no ha recobrado sus derechos por nuestras leyes?. ¿Nuestras armas no han roto las cadenas de los esclavos? ¿La odiosa diferencia de clases y colores no ha sido abolida para siempre? ¿Los bienes nacionales no se han mandado a repartir entre vosotros? ¿No sois iguales, libres, independientes, felices y honrados? ¿Podría Piar procurarnos mayores bienes? No, no, no. El sepulcro de la República lo abría Piar con sus propias manos para enterrar en él la vida, los bienes y los honores de los bravos defensores de la libertad. “El cielo ha visto con horror este cruel parricida. El cielo lo entregó a la vindicta de las leyes. El cielo ha permitido que un hombre que ofendía a la divinidad y al linaje humano no profanase más tiempo la tierra que no debía sufrirlo un momento después de su crimen. ¡Soldados! El cielo vela por nuestra salud, y el gobierno que es vuestro padre sólo se desvela por vosotros. Vuestro jefe que es vuestro compañero de armas, y que siempre a vuestros peligros y miserias, como también de vuestros triunfos, confía en vosotros. Confiar pues, en él, seguros de que os ama más que si fuera vuestro padre o vuestro hijo. Cuartel general de Angostura, octubre 17 de 1817. Simón Bolívar”. (AF)

Fusilamiento de Piar

16 de Octubre de 1817. El General en Jefe Manuel Piar fue fusilado en la Plaza de Angostura luego que el Consejo de Guerra presidido por el Almirante Luis Brión lo sentenció a la pena máxima por el delito de lesa patria, conspiración y deserción. Piar, nacido en Curazao en abril de 1774, fue fusilado a la edad de 33 años. Jalones importantes de su trayectoria militar a favor de la independencia son las batallas libradas en el Morro de Valencia, Pantanero, Güiria, Maturín, Los Magueyes, Los Corocillos, Cumanacoa, Barcelona, Carúpano, El Juncal, Paso del Caura, Puga y finalmente la Batalla de San Félix. Piar con la Guayana en sus manos y tan solo por vencer a las sitiadas Angostura y Guayana La Vieja, entregó a Bolívar el mando de sus tropas para que continuase la campaña, pero Bolívar lo relegó y la urdimbre de la intriga envolvió al vencedor de Chirica viéndose obligado a separarse del Ejército. No obstante, ya separado, los rumores sobre la inconformidad de Piar y sus presuntos manejos conspirativos llegaron por vía de Bermúdez a los oídos del Libertador, quien envió a Cedeño por su captura en Aragua de Maturín. Más tarde el General Carlos Soublette recibió orden de instruir el proceso “por los crímenes de insubordinados a la autoridad suprema, de conspirar contra el orden y tranquilidad pública, de sedicioso y últimamente de desertor”. El 14 de octubre se iniciaron las diligencias y una vez dictado el auto de proceder, Bolívar nombró el Consejo de Guerra presidido por el Almirante Luis Brión.. Como fiscal actuó Soublette y Defensor el Teniente Coronel Fernando Galindo. El 15 de octubre el Consejo lo condenó por unanimidad a ser pasado por las armas y Bolívar confirmó la sentencia sin degradación. Llevado al patíbulo, Piar oyó con desprecio la sentencia. Por dos veces arrebató con violencia el pañuelo con el que quisieron taparle los ojos y finalmente cuando el pelotón recibió la orden de disparar se abrió la esclavina y gritó: ¡Viva la Patria! Como intentando ahogar con aquella exclamación el ruido implacable de la descarga. El cadáver de Piar fue sepultado en el cementerio El Cardonal. Jamás se supo de sus restos. En 1928, en Bucaramanga, Bolívar volvió a justificar el fusilamiento expresando: “La muerte de Piar fue una necesidad política. Fue un golpe de estado que aterró a los rebeldes y aseguró mi autoridad. Nunca ha habido una muerte más útil, más política”.

sábado, 15 de octubre de 2022

Consejo de Guerra sentencia a Piar

15 de octubre de 1817, previa convocatoria, se reunieron un Almirante, dos Generales de Brigada, dos Coroneles y dos Tenientes coroneles, miembros del Consejo de Guerra designado por el Jefe Supremo, para decidir en el juicio militar seguido al General en Jefe Manuel Piar. La instalación del Consejo de Guerra tuvo lugar en la casa del Almirante Luis Brión que hace esquina entre las calles de la Iglesia (calle Bolívar) y del Gobierno (calle Constitución) y sus miembros acordaron hacer la votación por escrito y de manera individual, concluyendo en la siguiente sentencia: “Visto el oficio del Excmo. Señor Jefe Supremo de 3 del corriente, inserto por cabeza de este proceso que ha sido firmado por el señor General de Brigada Carlos Soublette a consecuencia de dicha orden, contra el General en Jefe Manuel Piar indiciado de los crímenes de insubordinado, conspirador, sedicioso y desertor y hecho por dicho señor relación de todo lo actuado al Consejo de guerra de Oficiales Generales celebrado el día 15 de Octubre de 1817 en la casa del Excmo. Señor Almirante Luis Brión, que lo presidió, siendo Jueces de él los señores Generales de Brigada Pedro León Torres y José Anzoátegui, Coroneles José Ucros y José María Carreño y Tenientes Coroneles Judas Piñango y Francisco Conde, sin que compareciese en el mencionado Tribunal el referido reo por no haberlo estimado necesario el Consejo; y oída la defensa de su procurador, y todo bien examinado le ha condenado y condena el Consejo a ser pasado por las armas, arreglándose a la ley prescrita en el artículo veintiseis, tratado octavo, título décimo de las ordenanzas generales. Inmediatamente pasó el General Carlos Soublette, Juez Fiscal a la posada del Jefe Supremo junto con el Secretario José Ignacio Pulido y entregó en su mano todo el expediente relativo al proceso. El mismo día, el Jefe Supremo la confirmó en los siguientes términos: Cuartel General de Angostura, Octubre 15 de 1817.-7º. Vista la sentencia pronunciada por el Consejo de guerra de Oficiales Generales contra el General Manuel Piar, por los enormes crímenes de insubordinado, desertor, sedicioso y conspirador, he venido en confirmarla sin degradación. Pásese el señor Fiscal para que la haga ejecutar, conforme a ordenanza, a las cinco de la tarde del día de mañana. BOLÍVAR.

jueves, 13 de octubre de 2022

Natalicio de Ramón Contasti

14 de octubre de 1795. En esta fecha nació Ramón Contasti, prócer angostureño, destacado como oficial activo en todas las Batallas decisivas de la independencia desde Venezuela hasta el Perú y posteriormente destaco en la vida militar, política y social de Guayana. El coronel Ramón Contasti tuvo dentro del acontecer político grancolombiano, una posición contraria a del Libertador, puesto que militó consecuentemente bajo las banderas del gran caudillo José Antonio Páez, pero como muchos, expuso y consagró su vida de soldado en áreas del ideal sublime de la emancipación y no conforme con ello, se vino a su tierra orinoqueña a llenarla de orgullo con sus galones y a servirla ya como Comandante de Armas o Gobernador. La vida de éste prócer comienza el 14 de octubre de 1795 cuando lo trajo a esta tierra que se empina sobre el río, sus padres Don Agustín Contasti y Doña María Hermenegilda Arcadio, quienes tuvieron otros cuatro hijos. El era el penúltimo y fue bautizado por el cura rector de la Catedral, con el nombre de José Ramón Calixto, pero siempre se dio a conocer simplemente como Ramón Contasti. Agustín Contasti, su padre, era Alguacil Mayor y Capitán de milicianos. Se radico en Angostura a finales del siglo dieciocho, procedente del principado de Cataluña, de donde era nativo. Aquí en Angostura contrajo matrimonio el 2 de enero de 1774 y como funcionario público tuvo acceso a una buena educación para sus hijos, entre ellos, Orocio, quien también fue oficial del Ejército Libertador y participó en la guerra de la emancipación americana. Los Contasti estuvieron al lado de la emancipación desde 1810, pero en el caso de Ramón Contasti, este no se alisto en el ejercito patriota sino en 1817, a la edad de 22 años, que es cuando efectivamente inicia la carrera militar como subteniente del Batallón de infantería Bravos de Páez que junto con los batallones Rifles, Barcelona y Albión, un regimiento de caballería y dos escuadrones de lanceros conformó el ejercito con el cual Bolívar invadió a la Nueva Granada. (AF)

Aparece el Profeta Enoc

13 de octubre. De 1926. Nadie sabe por donde entró el Profeta Enoc a Guayana. Lo cierto es que las primeras noticias de su presencia en tierras del Orinoco vinieron de La Paragua y aparecieron en el diario El Luchador de Ciudad Bolívar a mediados de octubre de 1926. Informaban que se trataba del mismo hombre que estuvo en Managua profetizando cosas espantosas, entre ellas, el juicio final. Los discursos los comenzaba con los primeros cuatro versículos del Capítulo 30 del Evangelio de San Lucas. Se trataba de un hombre de piel morena, ni gordo ni flaco, melena negra lacia, que se alimentaba de frutas y no aceptaba dinero ni hospedaje, prefiriendo acampar bajo un toldillo. El Profeta, calzado de sandalias que parecían no poder desgastar los interminables caminos, estaba tan de pronto en un lugar como en otro sin importarle la distancia ni exhibir cansancio, sino, por el contrario, siempre se veía reposado, vital y seguro de sí mismo. Por una carta de Cruz Lina de Matías, dirigida a don Jorge Suegart, se supo que el día 3 de octubre, a las 8:30 de la mañana, el Profeta se hallaba en Santa Cruz del Orinoco predicando en una esquina. La carta publicada en El Luchador dice que entonces el Profeta Enoc vaticinó la segunda venida del Salvador y dijo que sólo le faltaban cinco meses y medio para terminar de recorrer el mundo a pie, al cabo de los cuales se encontraría en Roma con el Profeta Elías para persuadir al anticristo. Pero el anticristo que, según el Apocalipsis, habrá de aparecer poco antes del fin del mundo para llenar la tierra de crímenes, no se dejaría persuadir sino que iracundo los mandaría a descuartizar. El Profeta Enoc estaba consciente de ello, pero por inspiración divina sostenía que al cabo del tercer día de muerto despertaría para no morir jamás. Era sin duda una buena esperanza para su jornada que en Guayana le tocaba cumplir en medio de un verano de sabanas encendidas al cual las pocas lluvias no podían vencer. El Profeta dijo entonces que aquel verano resaltado por asfixiante humareda de sabanas encendidas, era uno de los signos que comenzaban a presagiar la venida del Salvador. Otros signos serían terremotos y ciclones y una gran guerra que destruiría a Europa. Tan sólo la América quedaría en pie.

Juegos Florales

12 de Octubre de 1920. Ciudad Bolívar, siguiendo el ejemplo de Caracas y el Zulia, montó en esta fecha los llamados Juegos Florales para los cuales sirvió de escenario el Teatro Bolívar y la voluntad de hombres incondicionales de la cultura como el médico y poeta J. M. Agosto Méndez. Hubo tres torneos: el primero, dedicado al Día de la Raza; el segundo, el centenario de Juan Bautista Dalla-Costa y el último al Día de la Paz. Los juegos florales fueron certámenes poéticos en los que se premiaban las mejores composiciones con una flor de oro, de plata o con una flor natural. Se iniciaron en Toulouse, Francia, en la tercera década del siglo XIV y luego pasaron a España y de aquí a Venezuela. En el siglo veinte empezaron en Caracas, promovidos por La Revista, que era un semanario de arte y literatura, dirigido por Luis Alejandro Aguilar. Luego de Caracas, se realizaron en Maracaibo y en 1920 en el Teatro Bolívar de Ciudad Bolívar en el que participaron intelectuales como F. Cova Fernández, ganador de la Flor Natural, con su Canto Inmortal de diez versos, el primeros de los cuales dice: “Bajo el palio glorioso de las ínclitas velas/ la gran Alma Latina, sobre tres carabelas, / a las vírgenes playas de América arribó / Aclamando el prodigio de la madre Castilla / desató el Orinoco su argentea maravilla, / y sobre el Nuevo Mundo nueva raza nació.” El premio la Gardenia de Oro lo obtuvo B. Tavera Acosta por su trabajo de historia: “Las estrellas de la Bandera nacional” y el premio de Violeta de Oro fue adjudicado al cuento” Música Criolla.” Hubo accesit para los poemas “La Insignia de la Cruz”, de María Cova Fernández; “Ve de cara a la gloria de la apoteosis”, de R. Del Valle Lavaux y “Canto de la vida”, de T. Marcano Villanueva. Asimismo para los trabajos de historia “Jardín Heroico”, de Darío Monserrat y “La agonía de la colonia”, de Leonte Olivo. También recibieron accesit los cuentos “El propio esfuerzo”, de Eduardo Oxford López y “El nido roto” de Leonte Olivo.

Monseñor Juan José Bernal Ortiz

11 de Octubre de 1949. Monseñor Juan José Bernal Ortiz, nativo de Duaca (Barquisimeto) fue preconizado Obispo de Guayana para llenar la vacante de Monseñor Miguel Antonio Mejía, por su Santidad el Papa Pío XII y como tal fue consagrado en la Catedral de Caracas el 13 de noviembre de 1949. El 18 de diciembre de ese año llegó en avión a Ciudad Bolívar para tomar posesión de la Diócesis. Entonces fue objeto de un caluroso recibimiento contagiado con las festividades de Navidad y año Nuevo. Ese mismo año, dos meses antes, había sido electo también Obispo de Cumaná, Monseñor Crisanto Mata Cova. La gestión episcopal de Monseñor Bernal se extendió hasta julio de 1966 –16 años-. Tiempo durante el cual creó 19 parroquias, construyó el Seminario Cristo Rey de Ciudad Bolívar y las Iglesias de Pariaguan, El Tigrito, San Tomé, Santa Ana, San Joaquín, Anaco, Guasipati, Puerto Ordaz, Ciudad Piar, El Pao, Upata, El Dorado, Tumeremo, San Francisco de la Paragua, Caripito, Maturín, Quiriquire y Caicara de Maturín. Así mismo fue construido un nuevo Palacio Arzobispal en las afuera de la ciudad y la capilla y Colegio de la Divina Pastora. Parte del Vicariato Apostólico del Caroni fue incorporado a la Diócesis. Durante la gestión de Monseñor Bernal Ortiz, La Diócesis de Ciudad Bolívar fue nuevamente desmembrada. Por decreto de la Santa Congregación Consistorial del 2 de Enero de 1953 le fue sustraído todo el territorio del Estado Anzoátegui y creada, con Monseñor José Humberto Paparroni al frente, la Diócesis de Barcelona. Por Bula Pontificia el 21 de julio de 1958, Ciudad Bolívar es erigida canónicamente en Arquidiócesis y Monseñor Bernal se convierte en el Primer Arzobispo de la capital bolivarense. Ese mismo año Maturín igualmente fue elevado a la categoría de Diócesis con Monseñor Antonio José Ramírez Salavarría de titular.

Confiscación de bienes

10 de octubre de 1817. Bolívar, jefe supremo de la República, dicta en Angostura un decreto por medio del cual dispone que aquellas propiedades de los españoles que no se pudieran enajenar a beneficio del erario público, se repartiesen y adjudicasen al ejército en cantidades y proporciones, desde 500 pesos al soldado y hasta 25.000 al general en jefe. Este decreto tenía conexión con del 3 de septiembre de 1817 expedido en Guayana la Vieja, por el cual se secuestran y confiscan a favor de la República los bienes, muebles e inmuebles pertenecientes al gobierno español, a sus vasallos de origen europeo o a los americanos realistas, embarga también las propiedades quitadas por los españoles a los patriotas. Con el decreto del 10 de octubre, Bolívar busca recompensar los servicios de los defensores de la República y lo concreta en los siguientes dos artículos: 1º Todos los bienes raíces e inmuebles que con arreglo al citado decreto y reglamento (se refiere al del 3 de septiembre de 1817) se han secuestrado y confiscado, o deben secuestrarse y confiscarse, y no se hayan enajenado, ni se puedan enajenar a beneficio del Estado Nacional, serán repartidos y adjudicados a los Generales, Jefes, Oficiales y Soldados de la República en los términos que más abajo se expresarán. Art. 2º Siendo los grados contenidos en la campaña una prueba incontestable de los diferentes servicios hechos por cada uno de los individuos del ejército, la repartición de las propiedades de que habla el artículo antecedente, se harán con arreglos a ellos, es a saber: al General en jefe, 25.000 pesos; al General de División, 20.000 pesos, al General de Brigada, 15.000; al Coronel 10.000; al Teniente Coronel, 9.000; al Mayor, 8.000; al Capitán, 6.000; al Teniente, 4.000; al Subteniente, 3.000; al Sargento Primero y Segundo, 1.000; al Cabo Primero y Segundo, 700 y al Soldado, 500. El Decreto del Presidente del Congreso de Angostura, General Juan Bautista Arismendi, del 11 de diciembre de 1819, publicado en la edición 41 del Correo del Orinoco, amplía esta recompensa a las tropas extranjeras que luchan bajo la bandera de la independencia.

domingo, 9 de octubre de 2022

El Salto Ángel

9 de Octubre de 1937. El explorador norteamericano Jimmy Ángel (James Crawford Ángel), acompañado de su esposa Marie y los venezolanos, Miguel Ángel Delgado y el ingeniero Gustavo Henny, aterrizó su avioneta "Ryan Flamingo" sobre la Meseta Auyantepuy para dar a conocer una las cataratas más elevadas del mundo que hasta entonces había permanecido ignorada. Jimmy Ángel, quién falleció en Panamá el 8 de diciembre de 1956, fue una de las figuras novelescas de la historia de la aviación. En sus comienzos románticos era uno de los más arriesgados pilotos dando exhibiciones de vuelo en primitivos aviones, de un lugar a otro del mundo. Había nacido en Yuba City (California) en 1897 y llegó por primera vez a Venezuela en 1920 contratado por aventureros que querían explotar la Guayana en busca de oro y otros minerales. Su esposa Marie con la que hizo el aterrizaje sobre el Auyantepuy cuenta que Ángel había sido piloto de la famosa Amelia Earhart. El 9 de octubre de 1937 cuando Ángel exploraba la Meseta del Auyantepuy al sur de Ciudad Bolívar, comisionado por Thomas Guillard, del Museo Norteamericano de Historia Natural, su avioneta cayó en una ciénaga junto al Salto más imponente del mundo (1005 metros) y desde entonces lleva su nombre. La avioneta de Ángel estuvo plateando el Auyantepuy hasta febrero de 1970 que fue rescatada mediante una operación helitáctica de alta envergadura y llevado al Museo Aeronáutico de Maracay donde fue restaurada y exhibida con motivo del año jubilar de la Fuerza Aérea Venezolana. La avioneta había sido declarada monumento público nacional en septiembre de 1964. Jimmy Ángel, quién peleó en la Segunda Guerra Mundial al servicio de la Fuerza Canadiense y también al lado de la China Nacionalista, dijo antes de morir: “La avioneta es mía y nadie debe tocarla, ni puede, pues está en lugar inaccesible”. Sin embargo el gobierno del Estado Bolívar accedió a que la sacaran bajo palabra y documento de que la FAV devolvería la Flamingo una vez restaurada. La FAV cumplió su promesa de devolverla, pero diez años después, el 26 de abril de 1980. (AF)

viernes, 7 de octubre de 2022

Muerte de Monseñor Mejía

8 de Octubre de 1947. Fallecimiento de Monseñor Miguel Antonio Mejias, noveno Obispo de la Diócesis de Guayana. Había nacido el primero de junio de 1877 en el pueblo de Mendoza, Estado Trujillo. Estudió bachillerato en el Colegio “Sagrado Corazón de Jesús”, de la Grita, y luego en los Seminarios de Mérida y Curazao. Fue Ordenado Sacerdote el 13 de octubre de 1901 y tres años después recibió en la Universidad de los Andes, el titulo de Doctor de teología. Su destino inmediato como simple pastor de almas fue Betijoque y Valera, donde prestó servicios como párroco, educador y periodista hasta alcanzar, primero, la condición de Vicario y luego de Obispo. Fundó en 1905 el Colegio Santo Tomas de Aquino que dirigió durante dieciocho años al igual que las revistas El Caudillo y El Mensajero Católico. La transferencia de Monseñor Sixto Sosa a la diócesis de Cumana produjo un vacío en la Guayana que el Congreso Nacional se apresuró a llenar el 9 de junio de 1923 designando al prelado trujillano Miguel Antonio Mejía, quien fue preconizado por Su Santidad el Papa Pío XI, diez días después. La Consagración de Monseñor Mejía, en la Catedral de Caracas, 21 de octubre del mismo año, estuvo a cargo de Monseñor Felipe Cortesi, quien antes, 17 de diciembre de 1922, se erigió en el Primer Nuncio Apostólico que visitó a Ciudad Bolívar. La Diócesis de Ciudad Bolívar abarcaba los territorios de los Estados Bolívar (sede), Anzoátegui, Monagas y el Territorio Federal Amazonas, excepto la parte comprendida en el Vicariato de la Misión del Caroní. El Prelado se posesionó de la Diócesis acompañado de sus paisanos presbíteros doctor Dámaso Cardoso y Rafael María Villasmil. Al primero lo nombró Cura del Sagrario de la Catedral y el segundo Cura de la Iglesia de Santa Ana. (AF)

Primera sublevación de los Caribes

7 de Octubre de 1648. Al mando del cacique Quira-uera los caribes se sublevaron contra un poblado misionero en la zona de los raudales de Ature que era una avanzada de extensión de Santo Tomás de la Guayana dispuesta desde Santa Fe de Bogotá por el Arzobispado y el Presidente de la Real Audiencia Francisco Castillo de la Concha. Los caribes incendiaron el poblado y asesinaron a mansalva a los frailes jesuitas Fiol, Beck y Teobast. Sólo pudo escapar el fraile Julián de Vergara, Procurador de la expedición. Un quinto que formaba parte del grupo, el reverendo Radiel se había ahogado a fines de agosto de ese año. Dice el historiador Bartolomé Tavera Acosta en sus “Anales de Guayana” que para esos días habían logrado establecer los religiosos una casa fuerte en Carichana, de la cual fue jefe el capitán Tiburcio de Medina, con una dotación de 12 soldados, que servían a la vez de escolta a los misioneros. Fueron capellanes de ese fuerte: primero el Rvdo. Francisco Urbiena y luego, el Rvdo. Carlos Pinigati, quienes fallecieron a los pocos meses de residencia. Con la muerte de estos frailes quedó el capitán Medina con sus soldados hasta 1690 en que desguarnecieron aquel fuerte. A fines del año siguiente regresó el dicho capitán escoltando a los Reverendos Alonso de Neira, José Cobarte, Vicente Loberto y José de Silva, quienes se dieron a reedificar los destruidos pueblos fundados de Carichana, Sinaruco y San Lorenzo. Dos años no completos tenían esos frailes en aquellas regiones, trabajando heroicamente por tener mayor número de indios posible bajo su dirección, cuando el 7 de febrero de 1693 ocurrió la segunda sublevación de los caribes, al mando del mismo Quira-uera.

Creación de la Munipalidad

6 de Octubre de 1817. Un decreto de carácter administrativo dictó el Libertador estableciendo el régimen de la Municipalidad en Angostura y disponiendo que el Gobernador político de la provincia sea el Presidente con derecho a voto en las deliberaciones. La sala municipal contará además con seis regidores vocales y un escribano. Los electores serán nombrados por los padres de familia vecinos de la ciudad de Angostura, que no hubiesen tenido causa criminal abierta, que no hubieran sufrido pena aflictiva o infamatoria impuestas por las autoridades de la República y que además supieran leer y escribir. Con la misma fecha, el Jefe Supremo, dictó otro decreto disponiendo la creación de los Tribunales de primera y última instancias, correspondiendo al Gobernador Político, con asiento en la capital, que “oiga y decida en primera instancia, las acusaciones, quejas, denuncias, acciones y demandas por escrito que ocurran en la proincia, así civiles como criminales”. Los integrantes de la Municipalidad debían ser escogidos en asambleas parroquiales (un elector por cada 500 habitantes), aptos para elefgir y ser elegidos, es decir, electores mayores de 21 años, poseedores de propiedad raíz del valor de mil pesos o que segùn la ley electoral gozaran de empleo o renta de 500 pesos anual, o bien que ejerzan alguna ciencia. Se trataba de una Municipalidad distintida, pues así se llamaría en adelante y no Cabildo y en vez de Regidores, Vocales, y en cuato al poder local ejecutivo, no habría primer y segundo Alcaldes, sino que sus funciones las asumiría el Gobernador de la provincia, no obsante qe existiera un Alcalde provincial. Las elecciones se efectuaron el 8 de diciembre y los resultados conformaron la Primera Municipalidad bolivarense con los vecinos Lorenzo Lezama, José Luis Cornieles, José Tomás Machado, Felipe Delepiani, Guillermo Grillet, Tomás de Urbina y Casiano Bezares, se instaló bajo la presidencia del gobernador político de la provincia, uan Vicente Cardozo el primero de Enero de 1818.

martes, 4 de octubre de 2022

Apolinar Díaz de la Fuente

5 de Octubre de 1768. El Rey envía una instrucción al Gobernador Manuel Centurión, aprobando que Apolinar Díaz de la Fuente sea dotado de 6.000 pesos para emprender otra expedición, en la que deberá poblar La Esmeralda., fundar un hato y estimular las misiones en la región. Apolinar Díaz de la Fuente fue de los que acompañaron a José de Iturriaga y a José Solano y Bote en la Expedición de Límites que tenía como finalidad establecer las fronteras entre las posesiones portuguesas y las hispanas, vale decir, entre lo que es hoy la Guayana venezolana y el Brasil. Como teniente y comisario de límites, Apolinar Díaz de la Fuente encabezó la segunda expedición que José Solano envió en busca de las fuentes del Orinoco, con instrucciones precisas de explorar el enlace Orinoco – Río Negro a través del Caño Casiquiare. Estaba igualmente autorizado para fortificar los puntos estratégicos de la ruta. Esta expedición arrancó de San Fernando de Atabapo el 3 de diciembre de 1759 y estuvo activa hasta el mes de junio de 1760 cuando la Comisión de Límites recibió órdenes de retornar varios de los expedicionarios a España utilizando el puerto de La Guaira. Díaz de la Fuente permaneció en Guayana junto con Iturriaga para emprender nuevas expediciones y continuar poblando la región. Fue entonces cuando el rey instruyó a Centurión para Díaz de la Fuente fundara La Esmeralda como en efecto la fundó y pidió fuera elevada a la categoría de villa, luego que levantó 32 casas de bahareque e instaló en ellas a 13 familias. Seguidamente fundó a Santa Gertrudiz a la orilla del río Padamo y finalmente el Rey lo recompensó nombrándolo Gobernador de los Quixos en el Reino de Quito. (af

lunes, 3 de octubre de 2022

Sedición de Manuel Piar

4 de Octubre de 1817. Bolívar le escribe al General José Francisco Bermúdez para que vuele y se encargue del mando de la provincia de Cumaná a fin de acabar de una vez con el resto de los elementos sediciosos estimulados por el General Piar. La carta dice lo siguiente: “Mi querido General y amigo: De la correspondencia oficial para U, de ayer, he dispuesto que se le dirija hoy un duplicado, que irá con esta carta. Se impondrá U, por aquella, que he encontrado muy conveniente para el servicio y urgente para la seguridad del Gobierno, que U. marche a Maturín, y que volando se encargue del mando de la provincia de Cumaná, en donde acabará de conjurar los elementos de sedición y de guerra civil, obras, como U. sabe, del General Piar Desde que este llego a esta, fue sometido a la autoridad competente y se abrió su causa que sentenciara el Consejo de guerra conforme a las leyes vigentes. Piar debió haberse sometido, sin seguir armado, cuando vio de bulto que el país, ni el ejército seguían el crimen. Habría tal vez, ameritado el perdón pacífico del Gobierno; le seguiría el General Mariño, y quedando así sofocada la sedición acaso hubiera caído un velo sobre todo. Mi deseo particular, privado, es ahora que el Consejo pueda conciliar el rigor de la ley y el crédito del Gobierno con los merecimientos del reo. Escogeré para el Consejo de guerra, de entre los oficiales generales con las cualidades que quiere la ley, aquellos que yo sepa que no tienen motivos de resentimientos con Piar. Brion, su paisano y su más intimo amigo, será el Presidente y en los demás vocales se encontrarán criaturas de aquel. Ojalá que si el Consejo aplica la pena mayor; me abra camino, camino claro para la conmutación; y que el ejército ó los cuerpos más cercanos y de la Capital, por sus órganos naturales, la pidan sin separarse de la disciplina. Entonces, la responsabilidad del perdón, si este fuere indiscreto, lo compartiremos los que estamos levantando y sosteniendo el edificio de la Republica. Sofocada la sedición, sometidos o castigados de alguna manera los culpables, la vindicta pública estará satisfecha; se vigorizarán la disciplina y obediencia del ejercito; nuestros enemigos del extranjero no tacharan nuestra obra de falta de autoridad; y los malvados godos se encontraran sin base para culminarlos; no dirán “que somos una horda de vagabundos.” Que mas tengo que decirle? Lo demás que no es de una carta privada lo encontrará U. en la correspondencia oficial. Vuelvo a recomendarle prontitud en encargarse del mando de Cumaná. Adiós general y amigo. Soy siempre su afectísimo amigo, Bolívar. (AF)

Laudo Arbitral de Paris

3 de octubre de 1899. Un Tribunal Arbitral reunido en París dicto sentencia favorable a la Gran Bretaña en la reclamación, planteada por Venezuela, de más de 150.000 kilómetros cuadrados del territorio al oeste del Río Esequibo. Dicho Tribunal estuvo integrado por cinco jueces: los británicos Lord Russel, Justicia Mayor de Inglaterra y Lord Collins, Justicia de la Corte Suprema de la Gran Bretaña; dos norteamericanos, M Fuller, Presidente de la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos y D. Brewer, Magistrado de la misma Corte norteamericana; y como Presidente el profesor ruso de derecho internacional F. De Martens. Como se ve, Venezuela carecía de representación. El Tribunal Arbitral se instaló en enero de 1899 y sesionó durante varios meses conforme al tratado firmado en Washington el 2 de febrero de 1897 y mediante el cual se sometía el viejo conflicto de límites a un arbitramiento que determinaría la línea divisoria entre los Estados Unidos de Venezuela y la colonia de la Guayana Británica. Meses antes, en noviembre de 1896, habían firmado Estados Unidos e Inglaterra las bases del tratado que debía decidir la cuestión. Dicho tratado fue negociado entre Londres y Washington, negándose a Venezuela sus derechos de participar directamente sobre este asunto que incumbía a su integridad y soberanía. De acuerdo con el Laudo Arbitral dictado el 3 de octubre de 1899, la nueva frontera de Venezuela por la región de Guayana, comenzaría en Punta Playa, a varias millas de la desembocadura del Orinoco y remataría, por el sur, en la fuente del río Corentín. Es decir, que otorgaba a Venezuela una zona de la desembocadura del Orinoco y una pequeña faja al sur del Venamo. En resumen, unas cinco mil millas cuadradas de las 60.000 mil en disputa. La nueva demarcación coincidía de esta manera con la línea del naturalista prusiano Robert Schonburg expandida en 1840, y privaba a Venezuela de un inmenso territorio heredado de España a raíz de su independencia. En noviembre de 1962 el entonces Canciller de Venezuela, Dr. Marcos Falcón Briceño, denunció ante las Naciones Unidas el Laudo de 1899 y de allí en adelante Venezuela se lanzó a una ofensiva que dio lugar, primero, al acuerdo de Ginebra que fijaba las normas y alternativas para una solución pacífica de la reclamación, y posteriormente, el protocolo de Puerto España provocado por las tensiones entre Venezuela y la antigua colonia de Guyana que había recobrado su independencia de Inglaterra. Vencido el Protocolo que duró doce años, Venezuela reanudó la reclamación conforme a lo pautado en el acuerdo de Ginebra.

domingo, 2 de octubre de 2022

Piar conducido preso a la Angostura

2 de octubre de 1817. El General Manuel Cedeño comisionó al coronel Juan Francisco Sánchez para que con un escuadrón de carabineros condujera a Piar hasta Maturín y de allí al Cuartel General de Guayana donde sería puesto a la orden del Libertador, ientras él proseguía a entrevistarse con el General Rafael Guevara y otros disidentes en Cumanacoa. Piar es conducido a Guayana y llega a la plaza de Angostura en la noche del 3 de octubre de 1817 y es recluido en uno de los inmuebles, al norte de la Plaza, que servía de despacho al Estado Mayor. Debidamente informado el Libertador, quien permaneció en vela toda la noche, decide poner a Piar en manos de Carlos Soublette, en calidad de Fiscal y Juez con la siguiente documentación adjunta: Señor General de Brigada Jefe de Estado Mayor General, Carlos Soublette. Señor General: El señor General Piar, acusado de los crímenes de insubordinado a la autoridad suprema, de conspirador contra el orden y tranquilidad pública, de sedicioso, y últimamente de desertor, debe ser juzgado conforme a nuestras leyes. Como en virtud del artículo 4º capítulo 3º del reglamento de 29 de Mayo último corresponde a US instruir el proceso, procederá US a ello a la mayor brevedad en clase de Juez Fiscal, hasta poner la causa en estado de ser juzgada por el Consejo de Guerra que se nombrará oportunamente para su decisión, con arreglo al mismo capítulo 3º del citado reglamento. El Capitán ciudadano José Ignacio Pulido actuará en calidad de Secretario. Los trece adjuntos documentos impondrán a US de la conducta y atentados del acusado. US hará de ellos en el proceso el uso que es debido..Dios guarde a US muchos años. Cuartel General en Angostura a 3 de Octubre de 1817.- 7º BOLÍVAR. (AF)

sábado, 1 de octubre de 2022

Convocatoria del Congreso

Primero de Octubre de 1818. El Jefe Supremo reunió a los miembros del Consejo de Estado en el Palacio de Gobierno y después de un discurso sobre los avances del Ejército patriota y los Decretos dictados, propuso la convocación de un Congreso Constituyente dada la convivencia de darle al Gobierno “una forma y carácter de legalidad y permanencia”. En este punto sugirió para un proyecto y reglamento de elecciones populares la designación de una Comisión Especial. Los miembros del Consejo de Estado, luego de discutir la propuesta, convinieron al fin, y nombraron la Comisión Especial, integrada por Juan Germán Roscio (Director de Rentas) en calidad de Presidente; Fernando Peñalver (Intendente del Ejército); Diego Urbaneja (Auditor de Guerra) y a los miembros de Alta Corte de Justicia doctor Juan Martínez (Presidente); doctor Ramón García Cádiz (Fiscal) y el doctor Luis Peraza (Ministro). El doctor Ramón García Cádiz quedó como Secretario. En la misma reunión el Jefe Supremo nombró Presidente interino del Consejo de Gobierno al General de División Rafael Urdaneta y por Vocales al Señor Director de Rentas Juan Germán Roscio y al Señor intendente del Ejército Fernando Peñalver. Nombró también para Secretario del Consejo de Estado al Señor Fiscal de la Alta Corte de Justicia, doctor Ramón García Cádiz. El proyecto de Reglamento para la convocación del Congreso de Angostura lo discutió el Consejo de Estado los días 17 y 19 de Octubre y Simón Bolívar, luego de ponerle el ejecútese cinco días después, lo envió a los Comandantes Generales de las Provincias libres de Venezuela, al de la Provincia de Casanare, y al Gobernador del Obispado de Guayana a fin de que procediesen de inmediato al proceso electoral según el cual cada provincia o división debía elegir cinco diputados y comparecer acto seguido en la Capital para la instalación del Congreso el primero de enero de 1819. El Reglamento fue promulgado en el Correo del Orinoco por partes en las ediciones 14 del 24 de octubre y 15 del 21 de noviembre.(AF)